Tercer Tiempo, con brindis incluido
El Malbec Reserva elaborado con uvas de Calingasta ya está en el mercado, y en un mes llega su par de Pedernal.
Soñado. Imaginarse un Tercer Tiempo con aromas sutiles que sólo otorga la crianza en roble francés, frutos rojos sabrosos en boca que dan las vides de Calingasta, una acidez justa que se gesta en las uvas de altura, entre otros tantos aromas y sabores. ¿Qué más se puede pedir para un momento de distensión y confraternización? Que ese sueño se convierta en vino, casi como el milagro de las Bodas de Caná. Claro que sin llegar a ser ese prodigio divino, bastó imaginarlo, ponerlo en marcha y generar un Tercer Tiempo ciento por ciento Malbec.
El soñador fue Sebastián Hidalgo, licenciado en Comercialización, quien se dió el gusto de tener su propio vino elaborado con uvas calingastinas, criado durante 14 meses en barricas de roble francés de primer uso, más otro año de estiba en botella. El winemaker de esta partida de mil botellas fue Emiliano Lorenzo, y en un mes más será presentado el lote proveniente de Pedernal cuya elaboración estuvo a cargo de Juan Camuñas. En este caso habrá que esperar un poquito para degustarlo.
Históricamente el término Tercer Tiempo estuvo vinculado al rugby, aunque últimamente se usa bastante para relacionarlo con un momento de distensión después de alguna actividad que no necesariamente debe ser deportiva. Sebastián tuvo el tino y la suerte de haberlo registrado hace tiempo cuando el vino, aún era un sueño.
´Me dedico a distribuir productos para bodegas como corchos naturales, microaglomerados, cápsulas, tapa rosca, barricas de roble francés, artículos de embalaje, entre otros. Soñaba con tener y comercializar un vino propio, por eso se gestó. Es un Malbec de un viñedo de Calingasta, con una crianza de 14 meses en barricas de roble francés de primer uso, y otro año de estiba´, dice Sebastián.
Esta primera versión sólo cuenta con una partida de mil botellas elaborado con uvas de un viñedo ubicado a 1.459 msnm. Bien se sabe que las uvas de altura otorgan características particulares como gran cuerpo, buena acidez, estructura y buenos alcoholes. Tanto que el Tercer Tiempo tiene 14 grados que no se notan gracias a su redondez y equilibrio.
´Cómo soy del palo del rugby comencé a seguir a un equipo acá en San Juan en el que también ha jugado mi hijo y la verdad que yo veía que el tercer tiempo era maravilloso. Era un momento de diversión, de alegría, donde la rivalidad queda de lado, se liman asperezas pero básicamente es diversión, por eso pensé que era tan lindo que ese momento también debía compartirse con un vino. Hace años un amigo se encargó de registrar la marca aunque no tenía muchas esperanzas de obtenerla, sin embargo se concretó’, acota.
El vino está en muchas vinotecas locales a un precio estimado de 1800 pesos, con un exterior que llama la atención, no sólo por su etiqueta conceptual elaborada en Estudio Sisterna, si no también por una botella que pesa un kilo, capsula de estaño que sólo le colocan a algunos vinos de alta gama – en San Juan no hay más de dos-, y un corcho natural que cuesta 400 euros el millar.
´Estoy muy contento porque el vino gusta mucho, igual que el concepto de tercer tiempo que lleva implícito que todos merecemos ese momento lindo con amigos, conocidos, familiares o compañeros de trabajo‘, dice Sebastián.
Sin duda un sueño cumplido, y vendrán más.
** Beber con moderación. Prohibida la venta de bebidas alcohólicas a menores de 18 años. **