Para darse todos los gustos

Degustación de las delicias de Entre Montañas y los vinos Sempiterno, más la posibilidad de inspirarse para bocetar un cuadro. Todo eso y mucho más: este sábado, al mediodía, en la casa de té ubicada en la Avenida Libertador entre Manuel Belgrano y Libertad, en Rivadavia.

La convocatoria de este sábado tiene como nombre Entre Tinta y Tinto. Pero bien podría llamarse Impresiones Compartidas. ¿Por qué? Porque es una verdadera invitación a dar y recibir impresiones, pero también a estimular y dejar impresiones a través de las degustaciones más sibaritas que hay en estos momentos en San Juan y no conforme con esto, plasmar en un lienzo –con bastidor y todo a disposición- las sensaciones que inspire el momento. Obviamente la idea es que todo esto pueda compartirse entre familia y amigos.

La cita de este 15 de julio, en la casa de té y café Entre Montañas (en Avenida Libertador 3790, Rivadavia) es una paleta de propuestas interesantes que darán comienzo, puntual a las 13 horas.

La actividad reúne a tres emprendimientos locales que tienen mucho para ofrecer: la casa de té que hace poco cumplió 8 años dejando huellas con sus blends y su pastelería, la bodega que la familia Molina tiene en Quinto Cuartel, en Pocito, y la ahora itinerante (hasta no hace tanto tenían su propio espacio en la Avenida España pero lo cerraron para empezar a reproducir la propuesta en eventos de todo tipo) propuesta de La Añada, una iniciativa que invita a degustar y a pintar. Realmente es un convite a los sentidos, al buen gusto y a las ganas de pasar un rato divertido y diferente.

Cada uno aportará lo suyo: Sol Bastías y Mariana Bonacossa Quiroga de Entre Montañas, la comida a la que definen como de sabores auténticos y autóctonos. De hecho el primer paso será unas Bruschetta de jamón crudo, queso crema y tomate fresco acompañados de pesto de albahaca en pan blanco con semillas o la opción vegetariana de una Bruschetta caprese. Luego Tomaticán en pan de algarroba.

A modo de postre, una tarta de alcayota y nuez rellena de suave crema de queso.

Todas las preparaciones se irán maridado con un Cabernet Franc Sempiterno de la Finca La Macarena, un vino joven del 2022, más precisamente de la segunda vendimia de la firma, y, en el segundo paso, tal como detalla Santiago Molina, una degustación de su joyita: el Blend Tannat-Malbec otoñal, vino tinto artesanal, semi dulce natural logrado en una cofermentación de un Tanat Cosecha tardía de fines de este marzo, principios de abril y un Malbec 2022.

Este será el momento en que se ponga en acción el tercer componente de esta propuesta: Juan Francisco de la Plata de La Añada irrumpirá con sus bastidores, pinturas acrílicas y pinceles para que la embriaguez que deje cada uno de los sabores quede perpetuada en un cuadro que cada uno podrá llevarse a su casa.

Además habrá música y una exposición pictórica para completar la iniciativa.

¿Qué más se puede pedir para un sábado de invierno sanjuanino? Probablemente el secreto esté por el significado de Sempiterno (el nombre del vino que se va a servir): que las sensaciones duren para siempre, que no se terminen jamás.

Es fundamental reservar al 264-6222474, abonando el 50%. La opción cuesta 7000 pesos por persona.

Tres grandes

Los une el entusiasmo. Es la primera vez que lo hacen y seguramente, no será la última, aunque están acostumbrados a hacer eventos colaborativos con otros. Lo que rescatan de la iniciativa es que les permite potenciar a sus emprendimientos y llegar a más personas.

Por ejemplo, Juan Francisco resume que la propuesta de La Añada, que nació luego de la rigurosa pandemia del 2020, es ni más ni menos que una experiencia artística, gastronómica y enológica para conocer, degustar y maridar con vinos y buenos sabores, fusionados con la posibilidad de que cada participante pueda convertirse en un artista plástico. Su proyecto se ha convertido en itinerante para poder llegar a distintos espacios.

Santiago y Josefina Molina son en esta oportunidad la cara visible de la finca La Macarena y sus vinos Sempiternos, porque en realidad, este es un proyecto productivo familiar de los Molina- Olivares (con Catuco –un reconocido empresario y dirigente vitivinícola con activa participación en la cámara local que reúne al sector y en la Coviar- a la cabeza). Este emprendimiento productivo se encuentra en el Quinto Cuartel, en el piedemonte pocitano de la Sierra Chica de Zonda. Lo definen como una bodega boutique y artesanal porque cada uno de los pasos para que el vino llegue a la botella se hace de manera manual, desde la cosecha de los viñedos de Cabernet Franc, Malbec y desde este año, la primer recolección de Pinot Gris y Sauvignon Blanc, pasando por las  microvinificaciones y fermentaciones mediante el método manual o de bazuqueo, luego con chips de roble, hasta el etiquetado y lacrado de los envases.

Las chicas de Entre Montañas nacieron en 2015 para revolucionar la costumbre inglesa de la hora del té, darle otro sabor haciendo uso de los productos locales y romper con la costumbre sanjuanina de solo salir a la noche y a tomar café. Mariana y Sol –ambas técnicas en Gestión Gastronómica y Licenciadas en Hotelería y Turismo- se lanzaron casi solas en este desafío y actualmente trabajan con un equipo de casi 20 personas. No sólo lograron su cometido, impusieron su propia línea de té (entre los que hay florales, especiados y sanjuaninos como el Ansilta con té verde, durazno y melón desecado, burro y hojas de olivo o el Andes con té negro con jarilla,  pasas y semillas de zapallo) y pastelería (con por ejemplo la Tarta Calingasta con base de algarroba, rellena de manzana y peras o la Tarta del Valle con queso, alcayota y nuez que se va a servir este sábado) sino que ampliaron la propuesta con box para desayunos y meriendas a domicilio, productos para llevar y la opción de brunch que sirven de 9 a 22 horas.

** Beber con moderación. Prohibida la venta de bebidas alcohólicas a menores de 18 años. **