La cena más polémica (también) se sirve en San Juan

Se multiplican en el mundo las reuniones alrededor de la cocina cannábica o psicoactiva. Se hacen de manera casi clandestina porque no son legales en la mayoría de los países. La provincia no queda fuera de la movida. Si bien se resguardan los datos básicos de la propuesta, solo para que sepas te contamos que aquí, tres socios, ofrecen un menú que tiene agregados de aceite y manteca de marihuana.

Por curiosidad, para ver cómo “pega” o que le pasa al cuerpo, porque ya probaron alguna vez cannabis pero nunca en una preparación gourmet. Cada uno tiene sus razones. Y como dice el dicho, en cuestiones de gusto no hay nada escrito.

Lo cierto es que la cocina cannábica, que es tendencia -semiclandestina- en el mundo gastronómico, también llegó a San Juan. Por redes sociales y con el pedido de comunicación por mensajes privados entre los eventuales comensales, circula una propuesta a nivel local para los próximos días –NDR: no se dan detalles de fecha, ni lugar en esta nota porque los organizadores prefieren preservarlo y piden que tampoco se den a conocer sus identidades- que promete una experiencia con comida psicoactiva.

¿Por qué no se puede invitar abiertamente? Primero y principal porque en la provincia y en el país no es legal el consumo social o recreativo de la marihuana. Solo está legislado y permitido –desde el 2017-, para su uso medicinal, terapéutico o paliativo del dolor. A eso se suma porque hay muchos prejuicios y miedos, muchos infundados, otros no debido al desconocimiento real de las posibles reacciones que pueda llegar a provocar la ingesta por comida, en lugar de fumarla, que es el modo más frecuente de consumo. Algunos dicen que es más peligroso y que provoca efectos aletargados y más duraderos, otros que no, que genera un estado de bienestar muy interesante.

Más allá de esto, motivados y conscientes de que hay un mercado en crecimiento, tanto de cultivadores registrados como de consumidores, los organizadores locales de la cena en cuestión–que no es la primera vez que hacen una propuesta semejante sino que hace unos cuántos años ya dieron sus pasos en un restaurante muuuy conocido con preparaciones cannábicas- se han propuesto instalarlas como alternativa. Ellos sueñan con poder armar sus cenas una o dos veces al mes en San Juan. Pero su objetivo mayor es el de derribar mitos y prejuicios.

“Queremos con este tipo de eventos crear conciencia de la planta y sus beneficios, a nivel corporal, muscular, en tratamientos oncológicos, entre tantos otros. Queremos que sea un espacio para pasarla bien, con buena cocina, buena materia prima para probar cannabis, pero también para concientizar’’, argumenta una de las personas que está al frente del convite que incluye al menos dos platos con manteca de cannabis: una entrada de brusquetas y el llamado brownie loco de postre. En el medio hay otras opciones que no necesariamente van a llevar este ingrediente. Tienen propuestas carnívoras y veganas como primer plato. La iniciativa se complementa con degustaciones de variedad de cannabis, en distintas versiones y, solo para quien quiera, algunos masajes con cremas a base de las hojas de marihuana, según detalla este sanjuanino.

No podemos contar más que esto. Es solo aclarar que es una veta gastronómica nueva, que genera curiosidad y que a la par es muy cuestionada, pero que en San Juan, señoras y señores, ha empezado a ser una realidad.

Tema de series

Además de que hay propuestas similares a la que se va a llevar a cabo en San Juan, han empezado a aparecer libros de cocina y hasta una serie de Netflix -que muestra en seis episodios un concurso de chefs que hacen uso de su experiencia y conocimientos culinarios para incorporar los efectos de la planta en diferentes preparaciones, según la temática que toque encuadrarse para cocinar- que abordan el tema, dejando por sentado que la tendencia es real y en franco crecimiento.

** Beber con moderación. Prohibida la venta de bebidas alcohólicas a menores de 18 años. **