Dos Malbec, muy exclusivos

Uno es de La Ciénaga en Zonda, y el otro de La Puntilla, Calingasta. Apenas 1500 botellas de cada vino. Ideal para buscadores de nuevas experiencias sensoriales. Son robustos, y a la vez, frescos y frutados. Una madera que se percibe solo acompañando cada exponente. Dos joyitas de la cosecha 2021.

Los nuevos hacedores de vinos sanjuaninos no dudan ni por un instante en buscar (y encontrar) curiosidades que sorprenden a los consumidores. Mucho menos dudan en elegir marcas y establecer conceptos que acompañen a sus etiquetas. En este grupo se encuentran Abel Chiconi y Federico Riveros, ambos autores de los vinos ´Desfachatados´, que en poco tiempo ganaron un lugar de preferencia en el público.  Lejos de conformarse con la aceptación de la gente, a poco más de un año de presentarse en sociedad lanzaron otros productos tan inéditos como buenos. Se trata de dos microvinificaciones realizadas con uvas Malbec de La Cienaga, Zonda, y de La Puntilla, Calingasta.

¿Qué es una microvinificación? Como su nombre lo indica es una elaboración de vinos a muy baja escala, a partir de uvas de calidad y de zonas determinadas. En general son experiencias de laboratorio para reconocer la calidad de determinados varietales y suelos. También se caracterizan por un gran respeto en el proceso (natural), y por la búsqueda de técnicas para la elaboración. Está demás decir que son ediciones limitadas en las que se intenta reflejar el terroir de procedencia de las vides en su máxima expresión.

“Quisimos darnos el gusto de elaborar vinos con una uvas muy interesantes que no necesariamente se tienen que repetir al año próximo. Es una forma de explorar y encontrar cosas nuevas. Esto se usa mucho en enología para buscar variedades nuevas, zonas, e incluso parcelas dentro de una misma finca. Por eso en la etiqueta aparece un dron que es utilizado para detectar particularidades que hacen pensar que ahí hay algo bueno y luego se corrobora en estos ensayos. Así esa partecita seleccionada se elabora por separado en pequeñas cantidades. En base a eso decidimos divertirnos un poco y elaborar algo que nos gusta mucho “, cuenta Fede.

A esto se sumó Valeria Diumenjo, la diseñadora de las etiquetas, que tampoco dudó en dar un toque especial a un gran desafío: presentar fachadas que tuvieran estrecha relación entre sí, y que a la vez fueran diferentes. Casi dos etiquetas en una. Lo logró, siempre preservando la idea inicial de mantener un concepto, una coherencia y un hilo conductor en la gráfica de presentación de todos los vinos. En este caso es un joven que viaja en una combi vintage por todo San Juan mostrando sus paisajes –Valle de la Luna, Ischigualasto, Valle Fértil- entre otros que van surgiendo en cada caso-, de una manera muy descontracturada.

En el caso de las microvinificaciones señala el cuartel de la finca de donde salió la uva y el valle de procedencia. La contraetiqueta sigue brindando información, muy escueta pero condensa las principales características, incluido un mapa de San Juan y las coordenadas exactas de donde salió la uva en cuestión. Por supuesto las botellas son numeradas.

Uno de Zonda, otro de Calingasta

La idea es hacer dos microvinificaciones por año. La del año pasado, ahora a la venta, es de una pequeña partida de Finca la Ciénaga en Zonda, y otra con uvas de La Puntilla en Calingasta. Ambas de la variedad Malbec con lo cual se pueden percibir las diferencias de ambos valles.

Desde que uno lo sirve en la copa es sorprendido por colores excelsos de esos que dan los valles de altura. En nariz es una explosión de aromas complejos que invitan a tomar. Una vez en la boca, no queda espacio para percibirlos en su totalidad con una amabilidad y redondez propias de las buenas uvas y de una gran elaboración. La diferencia del terroir es claramente perceptible. Una experiencia para no perdérsela.

Detrás de escena

“Son partidas muy pequeñas que se elaboran con mil quinientos a dos mil kilos de uva, según lo que conseguimos en el lugar elegido, luego los fermentamos en bins porque cualquier otro tanque sería grande, con las levaduras propias del viñedo (nativas). De allí pasa a barricas viejas – de tercer uso- para que la madera tenga una baja incidencia. Tras seis meses es envasado –previo filtrado-. Nuestra formación técnica hace que seamos muy cuidadosos con todo el proceso, nos gustan los vinos muy prolijos”, explica Fede.

Para este año está prevista la elaboración de un Torrontés Riojano naranjo procedente de una finca de 25 de Mayo, para experimentar esta vez con una larga maceración como si fuera un vino tinto lo que permite adquirir el color naranja.

 

 

Más Desfachatados

Además de las pequeñas partidas, se suman un Sauvignon Blanc de San Martín y un Chardonnay de Ullum.

Otra línea muy exitosa es la procedente de Pedernal, que cuenta con un Malbec y un Cabernet Sauvingnon y El Gran Malbec Reserva. En todos los casos son partidas limitadas.

El Malbec Desfachatados se caracteriza por expresar toda la fruta que da ese terroir ya reconocido en el mundo, con marcadas notas florales, y apenas unos toquecitos de madera que sólo le dan complejidad aromática, muy lejos de parecer maderizado. Fácil de tomar y de acompañar con diferentes platos. El Cabernet es sorprendente al igual que el Gran Malbec que encierra todo lo que alguien puede aspirar en muy buen exponente.

Su historia

Abel y Fede se conocieron en 2004 en la Universidad Católica de Cuyo, y pronto se convirtieron en muy buenos amigos. Terminaron la carrera juntos, viajaron a otros países a realizar vendimias. En la actualidad Fede trabaja en la bodega Graffigna y Abel en Bórbore, sin dejar de visualizar muchos proyectos a futuro.

Federico no sólo tiene el expertise que dan las grandes bodegas, también cuenta con una elaboración en Mumm, Napa Valley en 2012, y luego en 2016 elaborando vinos tinto reserva de alta gama en la bodega Rombauer en la misma zona vitivinícola.

Abel comenzó su itinerario vendimial en 2011 cuando viajó a la bodega del padre de Michel Rolland ubicada en Burdeos, Francia, para realizar prácticas profesionales. En el 2012 también estuvo en Rombauer en Napa.

((destacado))

Sorpresas

Esto no es todo, Abel y Fede guardan celosamente el mejor vino del año pasado para presentar a mediados de año. Será el tope de gama de las líneas que contará con una presentación muy especial en caja de madera. ¿Qué será? En menos de 5 meses será develado el nuevo Desfachatado.

** Beber con moderación. Prohibida la venta de bebidas alcohólicas a menores de 18 años. **

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